11 de septiembre 2024 – Discurso Presidente de ASOFAR CF Marcos Gallardo Pastore

Estimados socios y amigos,

En el espíritu de la conmemoración del 51° aniversario del Pronunciamiento Militar de 1973, compartimos con ustedes en su totalidad el discurso pronunciado por nuestro Presidente, Capitán de Fragata, Sr. Marcos Gallardo Pastore, quien se dirigió a la audiencia llamándoles a no olvidar la historia y recordando la herencia de este proceso clave para Chile que se tradujo en seguridad y prosperidad y que también comprendió la presentación de una nueva edición del libro “Cartas del Almirante 1987- 1990” que contiene las palabras del Almirante José Toribio Merino Castro. Palabras llenas de firmeza y valentía que llaman a reforzar el espíritu de todos aquellos quienes han servido a la patria.

A continuación el discurso:

NUESTRA CONMEMORACION.

Al celebrar este quincuagésimo primer aniversario del Pronunciamiento Militar, despreciado cada vez por más voces que considerábamos amigas, incluso, nuestras, porque participaron del gobierno, lo vivieron y ahora, usufructúan de sus beneficios, y está olvidado por otros, quienes dicen no haberlo vivido… permítanme desarrollar tres grandes ideas.

La primera y motivo de este acto, recordar y rendir un homenaje a quienes dieron su vida ese día y los posteriores y que, a través de su sacrificio y la efectiva conducción de la Junta Militar, llevó a este país a alcanzar un estado de desarrollo social, económico y cultural, difícil de encontrar en los últimos 150 o 200 de años de historia patria, inclusive, hoy día mismo.

Los indicadores socioeconómicos, los datos que matan relato, demuestran claramente el tremendo salto que tuvo el país en materia de educación, de 250. 000 a más de un millón de estudiantes universitarios y todo lo que conlleva el mejoramiento del acceso a este nivel de educación, la construcción de redes de agua potable, servicios de alcantarillado, alumbrado, gas, teléfono, transporte público y una larga lista de etcéteras que, más que triplicaron las existentes al inicio del gobierno.

Pero, el dato, también tiene un relato, del que somos los responsables llamados a contarlo. Durante el Gobierno Militar, vivíamos un país seguro, en el que tantos niños, jóvenes y la ciudadanía eran, realmente, respetados en sus derechos y no había ideologías foráneas asaltando a la vuelta de la esquina.

Éramos un país en que se avizoraba un futuro mejor, que invitaba a estudiar y a trabajar por él. Éramos un país más feliz.

Las vueltas de la vida. Después de un bullicioso año que recién pasó, en el que, con motivo de los 50 años, el gobierno de turno gastó millones y millones de pesos, el resultado alcanzado fue que la encuesta, demostró que había un mayor reconocimiento por el Gobierno Militar. Son, las vueltas de la vida.

Sin embargo, hay luces amarillas en el horizonte. La estructura valórica, más que centenaria, que ha identificado a nuestra nación chilena y sus instituciones pareciera titilar. Hay voces que intentan reinterpretar lo que para nosotros fueron hechos de la causa.

Como Presidente de ASOFAR me intereso y trabajamos en este sentido, para sostener la posición, porque esta metamorfosis afecta a todos, de distintas maneras, incluidos nosotros, los oficiales en retiro, porque somos parte de esta sociedad, naturalmente, cambiante.

Ya decía el almirante Merino, en su libro “Bitácora de un Almirante – Memorias”, acerca de las causas del Pronunciamiento Militar: “Los altos mandos no podían opinar acerca de la forma de conducción de los intereses de la patria. Eran verdaderos eunucos que cuidaban el harem de las bellezas políticas corrompidas que habían destruido poco a poco el sentido de autoridad durante los 48 años de vida del país, que transcurrieron desde 1925 hasta esa fecha de 1973”

Hemos apoyado con mucho tesón la última sala del Museo Virtual de la Verdad Histórica que, a partir de hoy, está disponible en el sitio Web www.museoverdadhistórica.com o punto cl, de la que presentamos un breve adelanto:

Todas estas son buenas razones por las que cobra mayor relevancia esta parte final de mi intervención.

PRESENTACION DEL LIBRO “CARTAS DEL ALMIRANTE”

La Cámara Almirante José Toribio Merino Castro nos ha encargado la presentación de una nueva edición del libro “Cartas del Almirante 1987- 1990” Este libro conoció su primera edición, el año 1999, ejecutada por el Centro de Cultura Naval y Marítima.

25 años después, se reedita por iniciativa del Capitán de Corbeta Carlos Wulf Urrutia, quien financió su nueva edición y por el empeño del Capitán de Corbeta Jaime Urmeneta Cibié, Presidente de la citada Cámara José Toribio Merino Castro, asentada en el Caleuche de Santiago, para sacar adelante esta segunda edición.

Nuestra asociación aceptó este gran honor de anunciar, urbe et orbi, este importante hecho editorial y con gran entusiasmo, toda vez que la persona del almirante Merino Castro, nombrado Socio Ilustre por nuestra asociación, se agiganta con el paso del tiempo, en base a sus virtudes morales y liderazgo excelso con que dirigió la Armada de Chile, entre los años 1973 y 1990.

En efecto, el Almirante Merino fue la persona que impulsó las acciones del 11 de septiembre de 1973. También, dio un decidido impulso al incremento de la cultura marítima, de la que se beneficia el país en su totalidad, que se constata en la transformación del antiguo Museo Naval en el actual Museo Marítimo Nacional, cuyo cambio de nombre refleja la transformación de la valiosa tradición naval hacia una cultura marítima, más amplia y vasta, para acoger la tradición marinera de todos los chilenos.

Así mismo, su compromiso con el mar y la cultura, lo llevó a decretar, el año 1975, el mes de mayo, como el Mes del Mar, refrendando la necesidad que los chilenos, sin distinción, a conocer y hacer del medio oceánico, una de las principales fuentes para el desarrollo económico, social y cultural de Chile, haciéndolo coincidir con el mes que el país celebra a sus Glorias Navales.

Durante el período que comandó la Armada, ésta alcanzó un crecimiento exponencial en el desarrollo de capacidades estratégicas relacionadas con la construcción naval, la operación de sus buques, el desarrollo y la mantención de los sistemas de armas y la logística, que ha llevado a la Armada de Chile, a conseguir un merecido respeto internacional.

No es posible olvidar que, en su calidad de Comandante en Jefe de la Armada, con una visión estratégica digna de los más reconocidos marinos de la historia, condujo la institución con la firmeza, valentía y sobriedad que la situación requería, durante el conflicto con Argentina, el año 1978, mereciendo el más amplio reconocimiento de todo nuestro país. La firmeza de su carácter queda escrita con letras de oro en su mensaje al Comandante en Jefe de la Escuadra: Zarpar al sur y ganar la guerra.

También, cabe recordar que fue el precursor de la actualización de la Ley de Navegación vigente, que reemplazó la vigente, escrita por el abogado y marino Arturo Prat Chacón, en 1878 que, con un sentido de universalidad y permanencia en el tiempo de los principios, que contribuyó sustancialmente al incremento del tonelaje y al robustecimiento la Marina Mercante Chilena, no haciendo aconsejables modificaciones de importancia. Se ha discutido más bien, enmiendas inspiradas en tópicos de política contingente, discutibles sin duda, por ejemplo, la configuración de la dotación para enarbolar pabellón chileno o requisitos para considerar chilena a una persona jurídica propietaria de naves que pretenda registrar en Chile.

Como lo señalo, el aporte del almirante Merino al avance de la institucionalidad marítima chilena, supera la contingencia y constituye un sólido pilar sobre el cual se puede seguir avanzando, sin tocar su esencia. Hoy, esta ley se encuentra en un proceso de actualización, sin embargo, podemos observar que la completitud de su estructura y excelencia de sus consecuencias ha sido el principal escollo que han encontrado las actuales fuerzas políticas y sociales para poder alcanzar nuevos acuerdos que permitan su modificación.

En este plano de la institucionalidad marítima del país, cabe también señalar que fue el mismo almirante el impulsor de la modificación íntegra del Libro III del Código de Comercio, otro importante avance en la modernización de nuestro Derecho Marítimo.

Tampoco deberíamos olvidar que, con motivo del fallecimiento del almirante José Toribio Merino Castro, ocurrido el 30 de agosto de 1996, el Presidente de la República Eduardo Frei Ruiz Tagle decretó duelo oficial por tres días, reconocimiento más que suficiente a su persona, en los días en que Chile vivía una auténtica democracia. Y lo afirmo porque, de acuerdo a la información existente en todas las fuentes oficiales del Poder Judicial, no existe UN SOLO juicio en el que el Almirante Merino haya sido condenado por delitos de ningún tipo. Y eso, también debemos valorarlo.

Este libro, Cartas del Almirante, en su segunda edición, agrupa la totalidad de la colección de dieciséis cartas que el almirante envió a todos los oficiales en servicio de la época. En su contenido, redactado en forma amigable y directa, trata de los principios y valores que, como herederos de la sociedad cristiano – occidental, cada uno de nosotros debíamos conocer y defender, posiblemente, porque avizoraba los tiempos difíciles que deberíamos navegar en los años siguientes.

Es así que, tratando temas que versaron acerca del amor a la patria, la autoridad, el ejemplo y la coherencia, la experiencia y la esperanza, el cultivo de la virtud de la prudencia y otros relacionados con la conformación de nuestra nacionalidad, nos fue preparando para enfrentar, como decía, los nuevos tiempos que viviríamos a contar de la década de los 90.

En una de sus cartas, refiriéndose al patriotismo, señala: “Soy patriota, amo a Chile, mi libertad y mi tierra son mis mejor amigos, juré sobre su Bandera defenderla hasta dar mi sangre si fuese necesario, y por eso desprecio a los que pretenden traicionarla, ya que mi futuro y el de mis hijos dependen de mi legítimo patriotismo”

En otra carta señala: “Hemos elegido como medio de vida uno de los teatros más difíciles de la naturaleza como es el mar, al cual todos ya conocéis y sabéis que hay que respetarlo, pero no temerle. El mar es nuestro amigo y sobre la espalda de sus olas vamos a vivir o hemos vivido la mayor parte de nuestras vidas. Con él tendremos que contar para ganar batallas en la guerra, obtener riquezas en la paz, dar seguridad a nuestros compatriotas en el diario vivir y usarlo como el medio de transporte más barato y eficiente que en el mundo se ha inventado” Mensaje pleno de vigencia el día de hoy.

En su carta de despedida, señala “Os dejo en un alto nivel de calidad humana, material y moral, pero no tengo la pretensión de decir que no podéis llegar más arriba, sí podéis, y el esfuerzo diario de cada uno de vosotros, desde el Almirante hasta el último Grumete, debe ser justamente eso, superar los niveles hoy alcanzados para poder decir con orgullo justificado que, por vuestro esfuerzo, vuestra voluntad y vuestra inventiva SEGUIREIS SIENDO, SIN SER LOS MAS GRANDES, LOS MEJORES.

Con estas palabras del Almirante, cierro esta intervención, agradeciendo muy especialmente la presencia de sus hijas, María Angélica y Teresita, de los tres ex comandantes en jefe presentes, de los representantes de la Cámara Almirante José Toribio Merino Castro, de los socios honorarios, directores, socios y amigos presentes.

Mucha gracias a todos ustedes.

CF MARCOS GALLARDO PASTORE

ASOCIACION GREMIAL DE OFICIALES DE LA ARMADA EN RETIRO PRESIDENTE